http://lh6.ggpht.com/NfDCxUkrdf9fnD1IuLz_xPUfVQ_lDD1SHDp50yx-UOFOIuTrqOGs4LWtNhBOHBo8QB9pOL_ZoEgZ7zMU7NBn=s1200
Los cerezos silvestres producen frutos heterogéneos, de tamaño, color y sabor variable.
Por eso se aprendió a plantar partes de un árbol considerado valioso, con el fin de reproducirle; después de concluir que plantando semillas los árboles conseguidos eran diferentes, siendo las semillas aparentemente iguales. https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgprygZqJjMhCmQ7RAbE56trIlSK7cffXv5RpKSYebkMdOrF0Zx_vH1ol_WMeqiCRj4kWSwfDqsaXDLFFf7lHE0Nxgrbn2DgbvVVcWtCZUMqF4loQ02H_3s-93-NlrNieiscM64wLsUf-aH/s1600/recogia+esquejes+2.jpg
El común de los mortales desconoce que un árbol frutal cultivado no es un sólo árbol.
En realidad son dos árboles los que se unen para formar una unidad productiva eficiente.
http://www.laraflor.es/blog/wp-content/gallery/frutales/dsc03259.jpg
Uno de ellos aporta el sistema radical o parte enterrada y el otro la parte aérea formada por tronco y ramas. Las hojas visten y las flores y frutos adornan la parte aérea en periodos concretos de la vida vegetativa. Ambas partes se complementan.
La raíz, pie o patrón se escoge de la especie que se adapta mejor al suelo, capaz de soportar el carácter y condicionantes del mismo. La clase de terreno, composición, permeabilidad, profundidad, nutrientes, grado de humedad, periodos de helada y sequía, fauna subterránea, etc.
Tiene la finalidad de absorber los elementos precisos para desarrollarse y transferirlos a la parte aérea para elaborarlos.
Para el injerto, se elige una variedad que aporte las mejores cualidades productivas:
Adelantar la madurez o reducir el tiempo de entrada en producción (un árbol silvestre no produce cerezas antes de los siete años, hay variedades que las producen al segundo año de la plantación).
Producir una adecuada cantidad de frutos; mas apetecibles por su tamaño, color y sabor.
Disponer de mayor resistencia a plagas y enfermedades.
Adoptar una manera de crecimiento que facilite las labores culturales y la cosecha. Tales como una menor distancia entre nudos y ángulos de inserción mas abiertos.
Capacidad para auto-fertilizarse.
Es obvio que ambas partes se complementan. Raíces y copa condicionan el mutuo desarrollo, de forma que ambas pasan a ser una única planta con características propias, de tal manera que la semilla que producen ya no llevaría las características del patrón ni del plantón originarios, aunque hubiese sido fecundada por el polen de una flor del mismo individuo.
La parte expuesta a la intemperie, es una maravillosa fábrica que básicamente transforma la energía lumínica de la radiación solar en energía química; que por un proceso de fotosíntesis transforma la materia inorgánica en materia orgánica que contiene el carbono necesario para el desarrollo de la planta. http://es.wikipedia.org/wiki/Fotos%C3%ADntesis
En este complejo proceso intervienen, el hidrógeno y el oxígeno del agua (H2O) que la planta recibe y el carbono y el oxígeno del anhídrido carbónico (CO2) del aire. Las plantas absorben dióxido de carbono (CO2) y liberan oxígeno, modificando la composición del aire de la atmósfera.
En el proceso influyen condiciones ambientales y atmosféricas tales como la intensidad lumínica, el tiempo de exposición, el color de la luz, la temperatura, la disponibilidad de agua y la concentración de oxígeno y dióxido de carbono en el aire.
Todos los prunus producen frutos. Unos mas o menos dulces, otros mas o menos ácidos, otros mas o menos grandes. A lo largo y ancho de la Tierra, desde Japón a Inglaterra, pasando por Asia y Europa. En América de Chile a Canadá. En Australia. Cada región utiliza los frutos para consumir al natural y/o elaborar mermeladas, dulces o licores. Incluso con fines medicinales.
Pero el árbol mas majestuoso, el cerezo por excelencia, es el Prunus Avium (cerezo de las aves); puede llegar a dimensiones desmedidas si se les deja crecer a su libre albedrío sobrepasando 20 metros de altura o 12 metros de diámetro de copa,
Debido a que esta especie produce la fruta en la base de las ramas de un año y en ramilletes de mayo
que después de unos años evolucionan a ramas débiles (chifonas) fructíferas, de las que posteriormente el árbol se desprende cuando las ramas fuertes endurecen; los frutos se encuentran en la periferia de la copa.
Muchos frutos (los que antes maduran por la tendencia apical de la especie y la mayor exposición a la luz solar) se hallan "mas cerca del cielo que del suelo" quiero decir que están mas al alcance de las aves que de los hombres. (Quizás, de ahí su nombre).Por eso, igual que un salvaje garañón es un magnífico ejemplar que es mas útil para el hombre si le captura y doma; a esta magnífica especie hay que domesticarla para que resulte mas útil.
Aunque en ocasiones se le permite crecer libremente para que luzca todo su esplendor.
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